El 28 de junio, la dupla técnica de Nicolás Coelho y Patricio Capellini hicieron rodar la bocha en el inicio de las prácticas del Pre-Seleccionado masculino Sub 14 que en el mes de septiembre disputará en Buenos Aires el Campeonato Argentino de Selecciones.
Más allá de su juventud, ambos entrenadores conocen bien el terreno y en sus respectivos clubes comandan las divisiones formativas y juveniles. Patricio en Universitario y Nicolás en Jockey Club integran la parte técnica en los dos clubes mejor armados en la categoría masculina.
Desde el inicio del proceso, trabajan con una lista amplia de jugadores de los distintos clubes y desde los primeros días de agosto lo harán con el plantel definitivo que viajará a Buenos Aires.
En relación al plan de trabajo los entrenadores manifestaron: “hasta el torneo apuntaremos a entrenar y enseñar a los jugadores tres cosas básicas del hockey: recepciones, pases y quites. En los próximos días daremos la lista con los 18 jugadores y a partir de allí concretaremos más partidos amistosos y ajustaremos jugadas fijas, tácticas específicas y demás detalles”.
En esta categoría y como lo mencionan las cabezas de grupo: “El objetivo que nos planteamos es solamente formativo, con una lógica de comenzar un proceso de formación de jugadores. Pensamos que para el mejor crecimiento y formación del deporte, lo mejor es formar a los chicos hockísticamente, pero también humana y grupal-mente; que entablen amistades, se conozcan y disfruten de estar entrenando juntos, y desde aquí que aprendan hockey y valores humanos fundamentales como disciplina, humildad y respeto como puntapié inicial para la formación de un equipo competitivo en el futuro”.
En cuanto al grupo de jugadores participantes, ambos entrenadores lo retratan como heterogéneo, dado que existen integrantes muy nuevos dentro del deporte y otros con cinco años de experiencia. Con todo esto, Nicolás Coelho recalca que “si bien existe una diferencia en la coordinación técnica de los jugadores, una vez iniciado el proceso se están viendo grandes avances en el crecimiento de los chicos iniciados hace menos años, lo cual significa que este proceso de formación es fundamental para el crecimiento hockístico de estos jugadores, y da rápidamente sus frutos”.
“Las edades también son diversas, hay un grupo importante de jugadores clase 97, pero también otro grupo amplio de entre doce jugadores clase 96 y 95, tan sólo un jugador es 98; lo cual nos habla de una heterogeneidad importante” manifestó Patricio Capellini.
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