28.2.18

El mundial de Acrotela desde adentro


Pablo Suárez, deportista y referente de esta actividad participó de la máxima competencia que se desarrolló en Ancona, Italia. En una entrevista con la Confederación de Deportes nos contó su experiencia.

En enero, en esta parte del mundo el calor es insoportable. Pero en el otro lado del mundo, el frío se vuelve intolerable. Pero un argentino llevó todo su calor a la península.

Tras ganar en el Torneo Argentino 2017, obtuvo la clasificación al mundial que se disputó en la ciudad de Ancona, en la parte central de la península italiana y bañada por el Mar Adriático.

“Ver a los rusos, los ucranianos, da un poco de cosa. Uno se pregunta ¿Estaremos a la par de ellos?”, comenta. La respuesta a esa pregunta es si. Pablo consiguió el sexto puesto en este mundial, entrado dentro de la élite de los mejores deportistas del mundo.

Además de este puesto entre los diez mejores del mundo, Pablo fue invitado a dar una clase en Parma a 100 kilómetros de Milan. “Yo fui el único que después del torneo fui invitado a dar una Master Class”.

Pablo que da clases acá en Córdoba, si siente  muy  orgulloso de haber podido dar una clase. El único invitado a brindar su conocimiento en acórtela en la península itálica.

“Ya me llamaron para participar del próximo mundial”, cuenta. “Todavía no esta la fecha definida, pero espero que sea dentro de muchísimos meses para poder ahorrar”, nos dice, esperando poder juntar la plata para poder ir y cubrir los gastos que se originaron en este viaje. “El Torneo Argentino fue en noviembre, en diciembre me avisaron de que había calificado al mundial que era en enero. Compre los pasajes y todo sobre la hora.” Expresa.

Como es habitual en los deportistas amateur, el esfuerzo de familiares y amigos posibilitan la realización del viaje. “Yo tuve que pagarme desde los pasajes hasta el alojamiento, la comida, todo.” Comenta, y agrega “Todo esto hace que uno valore más el estar participando del mundial, estar a la altura de los  mejores y realizando todo a pulmón”.

Pablo Suárez no vive solamente de la práctica de este deporte, como es el caso de muchos deportistas amateur. Si bien da clases de acortela, en barrio Las Palmas, en el gimnasio Ana Maria Gym. También da Master Class los sábados en diferentes provincias.

Además trabaja en obras de teatro. “Como ahora muchas obras son con acrobacias, me llaman para participar. Ahora estoy trabajando en una obra en Carlos Paz, con eso puede llevar plata para el viaje”, comenta.


Pionero y referente de este deporte en Córdoba, Pablo realizó un largo camino en para llegar a estar entre los mejores del mundo. Es profesor de educación física, realizo danza contemporánea, “En ese momento no lo vi, pero hoy la danza me ayudo a tener línea en el aire”, agrega. Hace más de diez años que Pablo se dedica exclusivamente a las acórtelas.

“Recién este año la acortela es considerado un deporte amateur” dice y cuenta que “Córdoba es la primera en el país que lo considera así”.  ¿Por qué Córdoba es la pionera? “Porque es la impulsora del primer torneo, la impulsora para que se convierta en deporte”. “Además el Torneo Argentino se gesto aquí, y se sigue haciendo en Córdoba”, nos dice sintiéndose orgulloso de haber formado parte del inicio de este deporte.

Pablo nos cuenta que las gente que más se acercan a este deporte son “Persona que han practicado algo similar, como gimnastas, bailarinas, gente que hace patín” dice. “Pero también ha habido gente que ha venido sin saber nada y que hoy esta dando clases”,

Precursor de este deporte Pablo esta en el proyecto de armar un instructorado aquí en Córdoba. “Tendría una inclinación artística, se va a enseñar todo la que técnica en acortela, todo lo que es teatro sería otra currícula, escenografía y luces otra materia y anatomía y análisis de movimiento otra materia”, comenta y agrega que los egresados “saldrían con un título de profesor de acórtela con orientación artística”.



¿Cómo es la vida cotidiana de un deportista amateur?

Entre tantos viajes y entrenamiento como se hace para repartir el tiempo entre la familia, los amigos que también demandan la presencia de Pablo. “Es muy complicado”, cuenta. “Mis amigos y mi familia pasan a ser con las personas que entreno” dice Pablo reflexionando respecto a cuanto tiempo hace que no se junta con sus amigos.  

Las clases que dicta Pablo y sus entrenamientos buscan un equilibrio en la demanda de tiempo, como el yin y el yang. Mientras más tiempo entrena, menos clases puede dictar. Y mientras más clases de, menos tiempo para entrenar. El perfecto equilibrio entre entrenar para seguir estando en la élite o trabajar para poder mantenerse.

Además de los gastos en viajes, también están los gastos propios de este deporte, por ejemplo, “En cada presentación se usa una maya distinta, si en este torne usaste un maya para el próximo no se puede repetir” dice Pablo agregando “Que los detalles cuentan e cada presentación, y que cada maya debe estar hecha a la perfección”.

“Este el último argentino en el que participo”, dijo el año pasado. Pero llego la clasificación al mundial y Pablo siguió entrenando. Cuando se baje de la tela seguirá ligado al la acortela “Me dedicaré a formar gente”, comenta.


“Sigo aprendiendo. Chicos que fueron alumnos míos que hacen un truco que me gusta, le pregunto como lo hacen y lo adapto a mi forma”, dice Pablo. Con esta frase denota porqué esta entre los mejores diez de mundo. Él encontró la capacidad de aprender de las personas que lo rodean. Dejo de lado el recelo que tienen los maestros hacia los alumnos para poder seguir creciendo.