4.7.19

Franco Cortés: detrás de cámara, toda la acción en el alto rendimiento

Forma parte del cuerpo técnico de la Selección Argentina de Esgrima Adaptada. Y junto al esgrimista en silla de ruedas, Hugo Alderete, participaron en un corto publicitario para Loterías y Apuestas del Estado (España).





Franco tiene 25 años y se caracteriza por estar siempre en movimiento aprovechando las oportunidades que le brinda la vida.

Hace dos meses filmaron en el prestigioso Palacio Sans Souci, con una impecable coproducción Argentino-Española.


-        ¿Cómo surgió la propuesta para filmar esta publicidad?

Habían leído una nota sobre Hugo Alderete y su participación en la Copa del Mundo (Pisa, Italia), donde finalizó en el puesto 19º en espada.
Le ofrecieron la posibilidad de incluirlo en un casting y quedó seleccionado, pero el esgrimista que eligieron para que lo acompañara, no los convencía. Querían alguien más cercano a él y se les ocurrió que podía ser su entrenador.  Hice el casting y quedé.


-     ¿Cómo viviste esa experiencia?

Fue raro, pero estuvo buenísimo. Tenían todo contemplado.
Nos atendieron muy bien, visitamos el palacio, nos agasajaron con una comida y antes de filmar estuvimos conversando con el resto de los actores. A los que les despertamos una gran curiosidad.
Filmamos durante 8 horas. En la parte del esgrima, con Hugo fuimos los protagonistas y los otros esgrimistas eran de segunda escena.
Cada vez que hacíamos una acción, había repeticiones todo el tiempo.
La producción iba puliendo las escenas y se sorprendían con las cosas que podíamos hacer juntos.


Publicidad de Loterías y Apuestas del Estado (España)


A principios del 2018, Carlos Alberto “Beto” Rodríguez, presidente del Comité Paralímpico Argentino (COPAR) convoca a Franco para sumarse junto al entrenador Guillermo Cesio en la renovación del cuerpo técnico de la esgrima paralímpica.

Cuando me ofreció ser parte, me comentó que a los deportistas siempre le faltaba físico y me pidió potenciar este aspecto, más allá de lo técnico”, comenta Franco.


-  ¿Qué experiencia o vinculación tenías hasta ese momento con el deporte adaptado?

Viví durante mucho tiempo en el Cenard, como atleta de alto rendimiento del pentatlón y tuve varios compañeros deportistas: con disminución visual, problemas para caminar bien o en silla de ruedas.
Es más, tengo un amigo que es nadador, le faltan las dos piernas y un brazo y le admiro la “cabeza” que tiene para entrenar, siempre en positivo.
En el ISDE Instituto Superior del Deporte (Cenard), me recibí como entrenador de alto rendimiento, especializado en el atletismo. Pero laboralmente, no había tenido ninguna experiencia en el deporte adaptado.


-  Encarando este nuevo desafío profesional, ¿cómo es entrenar con Hugo?

En realidad, entreno con todos los deportistas de la sala. Pero especialmente me enfoqué en Hugo, porque puedo darle doble turno, lo puedo esforzar, pedirle mucho más ya que vive en el Cenard.
Tiene 35 años, es fuerte y cuando lo conocí no tenía flexibilidad, ni había hecho abdominales. Empezamos a trabajar en eso, lumbares, capacidad aeróbica. Siempre con el objetivo de lograr que tenga confianza en su cuerpo. En paralelo, hacemos lo técnico y la planificación del asalto, mi especialidad es la espada.
Preparo recursos propios y trato de adaptárselo. Busco en internet entrenamientos específicos, pero hay mucha reserva, no se comparte esa información.
Al principio lo entrenaba fuerte y fui aprendiendo a cuidarlo de las lesiones, porque muchas veces ellos se raspan y al no tener sensibilidad en ciertas zonas les provoca infección.
Uso mucho el recurso del video. Evaluamos juntos los errores o festejamos los avances que él pensaba como imposibles. Estos últimos, son los que me hacen sentir muy bien, como entrenador y como persona, porque son de gran ayuda para su vida cotidiana.

Hugo tiene mucha fuerza de voluntad, le dio duro y ahora es el mejor indiscutido.

Nuestra meta es llegar a los Juegos Paralímpicos Tokio 2020. Pero en el caso que no pueda, no es una frustración, es un avance para todos. Lo que importa es el camino.

Durante el entrenamiento, Hugo Adelerte y Franco Cortés.

El alto rendimiento es parte de la vida de Franco Cortés.
La esgrima adaptada hoy ocupa un rol muy importante pero no descuida sus entrenamientos como atleta del pentatlón. A pesar, que una lesión en su rodilla lo alejó de las competencias y actualmente está en proceso de recuperación, luego de la operación.


-  Sabemos que le dedicás la vida al deporte, ¿cuál es tu rutina diaria?

Actualmente estoy haciendo un curso de guardavidas, donde entreno mucho lo físico.
Diariamente. Me levanto a las 5:30 y hasta las 23:00 hs no paro.
Comienzo con la bicicleta, hago 60 km. En guardavidas nadamos 4.000 mts., seguimos con carrera y luego curso una materia. A la siesta trato de practicar tiro. Y a partir de las 18:00, entreno a los atletas de esgrima adaptada.
Algunos sábados también lo destino a los entrenamientos, sino aprovecho para descansar todo el fin de semana y recuperarme.
Me estaría faltando equitación para terminar de cerrar el entrenamiento de pentatlón, pero ahora no me dan muchos los tiempos.
Sigo entrenado porque en el momento que pueda, vuelvo a las competencias. Como atleta tengo mis propios desafíos.


-  Entre la esgrima y el pentatlón, en lo competitivo, ¿qué diferencias encontrás?

En cuanto a los entrenamientos, los de pentatlón son muy duros.
Pero en las competencias, la esgrima es más difícil que el pentatlón.
En esgrima un mal día te puede condenar, errás y ya te vas.
En cambio, en el pentatlón podés compensar.
La experiencia te da en apurar en algunos que te hace falta más y en otros bajar un poco la exigencia, buscar el equilibrio entre las cinco disciplinas (nado, carrera, tiro, esgrima y equitación).




 

 




Franco Cortés y las prácticas en entrenamiento de pentatlón.


En Buenos Aires, Franco vive con su novia, la entrenadora de gimnasia artística Agustina Gómez que también fue atleta de alto rendimiento.  Y su perro Milo, un yorkshire, que es una “bolita de energía”.

Para el 2021, tienen planificado instalarse en Córdoba, con el objetivo de continuar sus proyectos personales, en la tierra de donde es oriundo él.

Con el apoyo del COPAR, buscará expandir la esgrima adaptada y crear un centro de alto rendimiento. 
Por supuesto, su corazón está en el pentatlón y seguirá ayudando a potenciar este deporte en nuestra provincia.

Siempre se lanzó a nuevas situaciones con la confianza y seguridad, que iba a poder. Simpleza, tranquilidad, respeto, esfuerzo y superación son características que lo definen, tanto en el deporte como en la vida. 

La Confederación de Deportes, rescata esta historia que nos permite compartir que la vida está llena de desafíos y oportunidades, saberlas aprovechar en el momento justo es la gran decisión.