La jugadora canalsense, siente una profunda pasión por esta disciplina y por eso, trabaja día a día para su crecimiento. En esta nota, conocé sus sueños.
La entrevistada que es oriunda de Canals, pero se mudó a Río Cuarto para estudiar y trabajar. Se relacionó con el cestoball en el colegio secundario y desde ahí, no pudo despegarse del aro, ni de la pelota. Así, lo que más le gusta de este deporte son las prácticas, compartir tiempo con sus compañeras y la felicidad que le genera.
“Tuve cestoball, pero debimos cambiar porque la disciplina empezaba a dejar de realizarse. Me siento super bien cuando me enfrento al aro con una pelota, son momentos indescriptibles en los que me siento super feliz, pero nada de eso tendría sentido sin mis compañeras y el equipo que formamos”.
Al ser consultada por el rol de las mujeres
en la actividad, María Belén mencionó que “se les ha dado un lugar más
preponderante en el deporte” y actualmente, observa que la sociedad está
comprendiendo la irrelevancia del género en cuanto a la actividad física.
“Debemos aceptar que, tanto hombres como mujeres podemos destacar en cualquier deporte. De hecho, el cestoball ha sido una de las disciplinas que se caracterizó por sumarle el masculino a sus categorías, cosa que ha sido totalmente significativa y ha sumado mucho a nuestro deporte que, hasta hace algunos años atrás, solo era practicado por mujeres”.
A la jugadora le importa muchísimo el desarrollo de la disciplina, por eso sueña con lograr la inauguración de una escuelita en la localidad donde vive, para “ir creando el semillero y que no desaparezca el cestoball”. Asimismo, quisiera que haya más torneos provinciales y que los equipos se animen a participar.
“Al ser amateur, no existiríamos sin el esfuerzo mancomunado de todos lo que aún luchamos para mantenerlo en pie y que no quede en el recuerdo como un deporte argentino. Por eso, debemos trabajar en él”, destacó.
En este punto, nos parece importante reforzar
nuestro compromiso con la Federación Cordobesa de Cestoball, para
continuar desarrollando acciones conjuntas y garantizar el crecimiento de la
actividad.
Desde el retorno a las prácticas y
competencias, este deporte es el que menos roces o enfrentamientos tuvo. Esto,
genera que no se pueda medir el nivel de los clubes y todas las categorías
extrañen esa adrenalina.
“Puedo combinar perfectamente el deporte y mis otras responsabilidades. Si bien tenemos nuestras prácticas, la competencia a nivel provincial es escasa, por lo que son muy pocos los fines de semana que me reservo para ir a jugar. Disfruto un montón estas instancias y de hecho las extraño, ya que hace más de un año no hemos vuelto a enfrentarnos con otro equipo en una cancha”.
Con respecto a sus cualidades a la hora de
jugar, María Belén expresó que le gusta mucho la defensa y se exige para tratar
de hacerlo lo mejor posible. Además, destacó la labor de su DT, quien observa
las fortalezas de cada una y las ayuda a crecer o corregir errores.
Finalmente, a la espera del retorno a los campeonatos cordobeses, la entrevistada recomienda iniciarse en el cestoball porque
“te hace crecer, conocés gente y te vinculás de otra manera con el deporte”.
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