El nombre del
corto responde al apellido de la familia protagonista del mismo. Hablamos de Juancho, entrenador y padre de Valentina y Delfina, ambas gimnastas. La familia Podestá nos mostrará la
intimidad de su entrenamiento y preparación para grandes torneos. Documental dirigido
por Joaquín Caba.
En el caso de Walter, el acercamiento a la disciplina
fue de muy temprano. Hoy ya lleva casi una vida ligado a la gimnasia. A sus 9
años, en una escuadra de destrezas de la escuela primaria, hacían suelo y
salto. “El profesor Roldán
fue el que me hizo conocer esta actividad, y mira vos la importancia que tiene
un profe de Educación Física en la iniciación de un deporte” destaca
Walter.
Posterior a su
iniciación en la escuela primaria, y en busca de perfeccionarse en el deporte,
Walter arrancó en el Gimnasio Provincial del Parque Sarmiento, “con el profesor Roberto Mario Tulisse”
recuerda. Al arrancar desde chicos, se estaban iniciando en la parte de la
gimnasia de grandes aparatos, hoy conocida como gimnasia artística. Y ya desde
muy joven, siempre con la vocación de enseñar.
“Yo era gimnasta primero, y auxiliar técnico de mi profesor. Él nos fue enseñando la didáctica, la manera de conducir grupos de gimnastas. Desde temprana edad ya ayudábamos al profe, fuera del horario de entrenamiento éramos los auxiliares técnicos en las clases”.
En el caso de
Juancho y las gimnastas que entrena, en este caso 2 son sus hijas, la relación
lógicamente es distinta. Por un lado hay una confianza que puede tener su
costado positivo y otro no tan beneficioso. Confianza para preguntar o aclarar
ciertas cuestiones delicadas, y complejo si en la convivencia cuesta separar el
entrenamiento de la vida diaria.
Pero si hay algo
que sí se destaca en los entrenamientos de los Podestá, es la pasión y compromiso con la que encaran los desafíos. “Para costear algunos viajes tuvimos que vender el auto” cuenta
Juancho.
“Son dos palabras que habría que definir. Pasión viene del griego y significa sufrimiento, en el significado más puro. Pero traducido a la realidad de la vida, la pasión es realizar algo con tanto cariño y amor que a pesar de que a veces te hace sufrir, no dejas de hacerlo. Mientras que el compromiso está vinculado directamente con la pasión y representa esa actitud racional en donde nos programamos nuestras metas y objetivos, y somos constantes en la realización de los pasos que nos llevan a cumplirlas” explica Walter.
“Si entrenas bien cualquiera hace la serie,
tenés que entrenar cuando venís mal” le comenta Juancho a una de sus hijas,
en plena sesión de entrenamiento. Y claro, en la gimnasia estas dos palabras
están más que presentes en los deportistas. Walter agrega que: “Estos valores forman parte del eje
de desarrollo de cualquier programa de trabajo a mediano y largo plazo”.
Desde la Confederación de Deportes agradecemos
la palabra de Walter Gialdi, le deseamos éxitos en su carrera de entrenador y
dirigente. Al corto ‘Podestá’ lo
encuentran disponible en Cine.ar.
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