20.12.21

¿QUÉ SIGNIFICADO TIENE EL TRASLADO DE LA LLAMA OLÍMPICA?

A raíz del traslado de la llama olímpica que realizaremos para la Noche de Gala del Deporte Amateur, te invitamos a conocer un poco más acerca de la historia del simbólico acto.

Dentro del olimpismo creado por el Barón Pierre de Coubertin hay 2 símbolos muy importantes: la llama y el pebetero olímpico. Esta actividad surge como tributo a “la carrera de antorchas”, competencia donde los deportistas recorrían determinada distancia y los ganadores, tenían el honor de prender el pebetero a los pies de Prometeo, semidiós que les robó el fuego a los Dioses para entregárselo a los humanos. 

Esta representación, que tiene un componente de carácter religioso, fue tomada por el organizador deportivo Carl Diem en el año 1936 para trasladar el fuego desde el templo de Hera, hasta la ciudad donde se realizaban los Juegos  Olímpicos.

Es muy importante aclarar que la “antorcha” surge después de lo que se denomina pebetero. Este último elemento, apareció en los Juegos de Ámsterdam 1928 y formó parte de un concurso de arquitectura donde el ganador debía construir un pebetero donde se encendiera un fuego y tuviera una cierta altura para que sea visto por todos los ciudadanos. 

Dentro del movimiento olímpico hay varios principios: 

  • Poner el deporte al servicio de la humanidad, 
  • Organizar los Juegos Olímpicos, 
  • Accionar en favor de la paz y en contra de la discriminación, 
  • Promocionar la participación femenina en el deporte, la ética del fair play y la inclusión, 
  • Luchar contra el dopaje,
  • Accionar en favor del deporte y el cuidado del medio ambiente, 
  • Proteger y difundir los símbolos olímpicos. 

Además, Pierre de Coubertin, consideraba al fuego como una simulación de lo que hacían los heraldos cuando 30 días antes y 30 días después de los Juegos, recorrían Grecia anunciando el suceso. 

La llama no solo habla de la unión entre distintas culturas, sino que es un llamado para que los jóvenes del mundo practiquen deporte en espacios de paz, ameno, igualitario y seguro.